Gobierno se encargará del transporte de los lotes grandes de la vacuna Sputnik V

El Gobierno boliviano se encargará de traer los lotes grandes de las  vacunas Sputnik V desde el laboratorio de Gamaleya que se encuentra en Moscú (Rusia) hasta el  país. Además, el Ejecutivo distribuirá las dosis  a cada uno de los Servicios Departamentales de Salud (Sedes). Luego, estas instancias deberán llevar los fármacos hasta los centros de  inmunización.

“La llegada de las vacunas desde los laboratorios de Gamaleya hasta Bolivia va a correr por cuenta de nuestro gobierno y (también) su transporte hasta las gobernaciones. El Estado   entregará a cada una de las gobernaciones (los fármacos) y ellas (deberán distribuirlas) a los municipios bajo su responsabilidad. En el ciclo de transporte hay varias responsabilidades”,  explicó   el vocero presidencial, Jorge Richter, en una entrevista con Página Siete.

El 30 de diciembre,  el Gobierno de Bolivia suscribió un contrato con su similar ruso para la provisión de 5,2 millones de vacunas. En esa oportunidad, el presidente Luis Arce informó que la primera entrega de 6.000 dosis llegará este mes. Richter afirmó que las dosis de  este lote llegarán  a través de la compañía DHL,  tal como fue acordado con el Fondo de Inversión Rusa. “DHL está transportando vacunas masivamente en el mundo”, precisó.

El dignatario  dijo   que un lote de 1,7 millones de dosis arribarán a Bolivia en marzo, a fines de abril arribará otro de  1,7 millones; y finalmente el resto llegará en mayo.

“Se está definiendo (la forma del traslado de las dosis de la vacuna de Rusia), pero es muy posible que hagamos uso de nuestros aviones y se está viendo que cumpla con la cadena de frío. No tenemos una exigencia de Pfizer que requiere menos de 70 grados; pero la Sputnik requiere una refrigeración de menos dos a menos ocho grados centígrados. Se está resolviendo ello para ver el medio de transporte más idóneo”, sostuvo  el vocero presidencial.

 Cláusula de confidencialidad

El día de la firma del contrato, el ministro de Salud,  Édgar Pozo,  declaró a los medios de comunicación que cada una de las vacunas costará 9,5 dólares. Es decir que el Gobierno de Bolivia destinará 49,4 millones de dólares en la compra de todo el lote. Sin embargo, Richter aclaró que el costo es “confidencial” porque  así lo establece el contrato.

 El decreto de la clásula

“El decreto 4433 establece una cláusula de confidencialidad respecto a la vacuna y eso es lo que demandan los distintos laboratorios por temas de orden comercial. Ese tema lo preservan los laboratorios que están en una competencia de libre mercado internacional; están en competencia para la venta y el acomodo de la mayor cantidad de vacunas”, explicó el alto funcionario.

A mediados de diciembre del año pasado, la ministra belga  Eva De Bleeker divulgó en Twitter los precios que la Unión Europea pagaría por cada dosis de   vacuna, un episodio que dejó expuesto al poder ejecutivo europeo,  ya que esos valores eran guardados bajo reserva. La lista de precios mostró a su vez que la vacuna de Oxford/AstraZeneca es la más barata al valer  1,78 euros y la de Moderna es la más cara con 18 dólares,  pero en esta lista no figuraba la vacuna rusa Sputnik V.

Pfizer se quejó de la violación de la confidencialidad entre las partes: “Estos precios están cubiertos por una cláusula de confidencialidad en el contrato con la Comisión Europea”, y  la Unión Europea resguardará la confidencialidad de sus pedidos anticipados de vacunas mientras continúen  las negociaciones con los laboratorios a pesar de las fuertes presiones por más transparencia.

Al respecto, Richter precisó: “Si nosotros no habríamos querido incorporar (esta cláusula de confidencialidad),  no habríamos podido comprar ninguna dosis de vacuna”.

Consultado sobre si en ese caso, el Ministro de Salud cometió una indiscreción, el vocero presidencial respondió:  “No puedo señalar lo que dijo el ministro. Esa es una declaración que no la escuché y no haría bien en referirme a ella. Señalé desde la vocería que el contrato suscrito tiene una cláusula de confidencialidad y en lo que hace a las vacunas es público”, aclaró.

El funcionario agregó que los contratos que incorporan las cláusulas de confidencialidad “comprometen la fe del Estado”. “No podemos señalar el precio de la vacuna de manera abierta y oficial. Lo que sí puede encontrar son los precios que circulan en internet, los que maneja el Fondo de Inversión Rusa y los  precios referenciales de lo que hicieron otros países. Lo que pagamos son precios internacionales de la vacuna en un momento dado y específico para tener de forma rápida una partida en enero y las restantes en marzo, abril y mayo”, dijo.

Ante las críticas, el vocero Jorge Richter recordó que la firma del contrato fue pública con el Fondo de Inversión Rusa, que es una extensión del Gobierno ruso. Indicó que en este proceso intervinieron la embajada rusa, la Cancillería de Bolivia, el Ministerio de Salud y un sinnúmero de autoridades del Gobierno ruso y del laboratorio Gamaleya.

“Lo que sí se está queriendo hacer es tratar de asociar negativamente el proceso de vacunación y toda la estrategia de lucha contra la Covid a una situación de anomalía, irregular que no corresponde”, afirmó.

 

Las  características

  • Salud Bolivia realizó el registro de la vacuna rusa Sputnik V  sin ensayos clínicos en el  territorio nacional. Ante  esta determinación,  miembros de la directiva de la Sociedad de Infectología observan  la aplicación de este fármaco   en el país porque no concluyó el estudio en su tercera fase.
  •  Anuncio A través de un comunicado del Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF), que se publicó en  la agencia rusa Sputnik News,  se conoció que Bolivia registró el uso de la vacuna Sputnik V para frenar los contagios del coronavirus a través de un procedimiento de emergencia (emergency use authorization). Según la  agencia,   se tomaron  como referencia los datos de las pruebas clínicas realizadas en Rusia.

Registro de las  dosis

  • Explicación El ministro de Salud y Deportes, Édgar Pozo Valdivia, informó ayer del registro de la vacuna contra la Covid-19 Sputnik-V y aclaró la necesidad y la emergencia que tiene el país para adquirir la vacuna que debe ser administrada de manera voluntaria. ”Toda acción que está dirigida a proteger la salud del país, obteniendo equipamiento, vacunas, pruebas de diagnóstico, es emergencia”, sostuvo la primera autoridad de salud del país.
  • Salud Pozo agregó  que pese a efectuar el contrato con Rusia, no hay una predisposición especial por ninguna de las vacunas e indicó que el país ve la posibilidad de adquirir los fármacos de otros países y otros laboratorios. “Hay acercamientos con Rusia, China, con Estados Unidos, pero no sólo con países sino también con laboratorios. Depende de las industrias que están poniendo a disposición las diferentes vacunas”,  dijo.El viceministro de Comercio Exterior, Benjamín Blanco, aseguró que  el país  continúa con las negociaciones para comprar dosis de otras industrias para garantizar la inmunización del 100% de la población.

Página Siete